FERROL (GALICIA) Y FALL RIVER (MASSACHUSETTS) – Artículo publicado en la revista nº 21 de ATENEA
La bahía de Narragansett está situada en la costa atlántica de EE.UU. y baña a los estados de Massachusetts y Rhode Island. Tiene una longitud de 30 km y dos entradas desde el océano (separadas por unas islas) de 10 km de longitud, con un ancho de bocana de aproximadamente 1.500 metros. La bahía de Ferrol tiene una longitud de 7 km, una sola entrada, bastante tortuosa para la navegación, de 140 a 200 metros de ancho y 5 km de longitud.
La bahía americana tiene en el extremo interior dos pequeñas rías en donde desembocan los ríos Tauton y Providence. En la primera ría, en el lado oriental de la bahía, se asienta Fall River (Massachusetts), una ciudad de 100.000 habitantes y en la segunda, la ciudad de Providence (capital del estado de Rhode Island) de 180.000 habitantes. Ferrol también esta situada en una ría, pero más pequeña y con menos habitantes que las anteriores y en su extremo interior también desemboca un río, el Jubia.
Ambas rías, Narragansett y Ferrol, tuvieron su origen por las excelentes condiciones de abrigo para los buques que navegaban por la zona y por esta razón nuestros ancestros marinos instalaron en ellas sus hogares, almacenes, talleres, astilleros, etc.
También las empresas gasistas fueron conscientes de estas características y han propuesto instalar en el interior de las dos rías y a cierta distancia de las tres ciudades, Ferrol, Fall River y Providence sendas plantas regasificadoras de Gas Natural Licuado (GNL). ¿Por qué? Fundamentalmente porque en los tres casos se cumplían dos requisitos fundamentales y apetitosos para las empresas gasistas: el primero evitar la construcción de un dique de abrigo para conseguir que el gasero estuviera “inmovilizado” durante las operaciones delicadas de descarga de gas licuado y el segundo para conseguir la menor distancia entre las regasificadoras y las redes de gasoductos nacionales. Por otra parte, la ausencia de accidentes mayores en este tipo de planta animaron a los gasistas a tener la osadía de acercarlas a poblaciones agrupadas, contraviniendo las normativas del sector y el más mínimo sentido de la prudencia. Lo peor es que ni saben y ni quieren saber las consecuencias para la población de un accidente mayor en este tipo de plantas de gas licuado.
Estas empresas, conscientes de la impopularidad de estas industrias, publican en sus páginas web y en los periódicos locales, a veces con su connivencia, las “ventajas” típicas que estos proyectos pueden suponer para la población de la zona, como son: fin del paro, reducción del precio del gas, polo de atracción de otras empresas, energía limpia, chorreo de dinero a las arcas municipales, etc. No cabe duda que la mayoría de estas ventajas son falacias simplonas que se descalifican por si solas, no obstante, los psicólogos de las empresas gasistas saben que con su difusión consiguen desorientar a la población, a los medios de comunicación y también a ciertos políticos de poco “calado”.
La LNG Terminal Act of 1977, emitida por la comisión de energía del estado de California ha sido un referente importante para el asentamiento de las primeras plantas regasificadoras de GNL. Esta normativa exigía una distancia mínima de 4 millas (6´5 km) a poblaciones agrupadas de más de 60 habitantes. Posteriormente, las reglamentaciones aplicables a este sector incluyeron la exigencia de realizar un Estudio Cuantitativo de Riesgos (QRA). Algo que en España no se practica con rigor, al menos en el sector del gas natural licuado.
En la bahía de Narragansett existen otras poblaciones más pequeñas como son: Bristol, Portsmouth, Middletown, Somerset, Tiverton, New Port, Barrington, etc., de algo menos de 30.000 habitantes cada una. La ría de Ferrol también existen zonas pobladas agrupadas, Fene, Mugardos, A Graña, El Castillo de San Felipe, etc., aunque de menos habitantes que aquellas.
En la bahía de Narragansett se ubica la famosa base militar Naval Undersea Warfare Center de New Port, de submarinos y portaaviones, próxima a la ciudad del mismo nombre. Ferrol también tiene una base naval de la Armada Española y astilleros militares. Por ambas rías circularán, si progresan los proyectos que estamos comentando, enormes gaseros cargados de GNL.
La USCG (servicio de guardacostas de EE.UU.) limita una zona de seguridad perimetral, alrededor de los gaseros, mientras navegue por la ría, de 1.000 yardas (915 metros) de ancho y que impide cualquier movimiento en esa zona de buque o lanchas durante el tiempo de estadía del mismo. Los gaseros son escoltados por varios buques del USCG, lanchas de la policía, helicópteros, etc. La ría de Ferrol tiene 1 Km de ancho, lo que hipotecaría cualquier movimiento de los buques, (incluyendo los de la Armada Española) si se llegara a aplicar esta norma.
En Ferrol, nuestras autoridades marítimas no se han manifestado en este sentido. Existe en vigor una norma de navegación y practicaje para la navegación de cualquier buque en nuestra ría y que si se aplica, los gaseros no podrían operar en la actualidad.
Debido a los estudios de navegación de los gaseros para operar en la bahía de Narragansett es preciso realizar un dragado en la zona de Fall River, el cual es fuertemente rechazado por los biólogos del sector pesquero, por el propio cuerpo de ingenieros del ejército, pescadores deportivos, asociaciones ecologistas, etc. También será necesario ensanchar el puente levadizo de Brightman Street de Fall River. La bahía de Ferrol también se requiere el dragado para la navegación de los gaseros, aunque se tiene que realizar en el canal de acceso, mucho más difícil de ejecutar debido a su fondo rocoso.
En las plantas de GNL propuestas de Providence y Fall River no se utilizará el sistema abierto (open loop) de agua de mar para regasificar el gas licuado criogénico ya que lo prohíbe la Clean Water Act de los EE.UU. Este sistema de regasificación consiste en circular ingentes cantidades de agua de mar por unos vaporizadores y que al calentar el gas licuado lo convierte de nuevo en gas, enfriándose el agua, la cual será vertida de nuevo a la ría unos 7 a 10 ºC más fría.
Para evitar la acumulación de colonias de seres marinos en el interior de los conductos (que los obturarían) y vaporizadores de la planta es preciso mezclar el agua de mar con hipoclorito sódico para matar a las larvas y huevos de pescados y moluscos de forma que no “anidarían” en los sistemas de vaporización. El agua al volver al mar fría y envenenada esquilmaría los bancos marisqueros de la ría. En la planta de GNL de Ferrol se pretende ahora utilizar este sistema cuando sus promotores manifestaron, hace cuatro años, su intención de no hacerlo tal como publicaron los medios de comunicación en aquel momento y reconociendo la no conveniencia de su uso. El caudal de agua necesario que se estima en la planta de Ferrol es del orden de 60 millones de litros al día, más del doble del caudal del río Jubia. Descoconozco si por parte de los biólogos que trabajan en la ría de Ferrol se han realizado alegaciones y/o estudios de impacto sobre el habitat marino de este sistema de vaporización.
Tanto en la bahía de Narragansett como en la de Ferrol se formaron asociaciones de vecinos para coordinar las acciones legítimas de protesta en contra de estos asentamientos. En Narragansett se forma una asociación de nombre Save the Bay (Salvemos a la Ría) en la cual partcipan todo tipo de asociaciones de vecinos, pescadores deportivos y comerciales, etc.
En Ferrol se forma en julio del año 2.001 el Comité Ciudadano de Emergencia de la Ría de Ferrol constituido en la actualidad por más de 50 asociaciones de vecinos, culturales, profesionales, deportivas, mariscadores, etc.,ignoradas por el actual alcalde de Ferrol.
La Energy Bill (Ley de la Energía de los EE.UU.), aprobada el 29 de julio pasado, incluye una cláusula que da plena y única autoridad a la FERC (Comisión Reguladora Federal de la Energía) para decidir las ubicaciones de estas regasificadoras. Esta cláusula fue incluida a última hora, se dice que a instancias del presidente Bush, dados los rechazos que se estaban sucediendo en las zonas propuestas para ubicar estas plantas de GNL y obviamente a solicitud de las empresas gasistas. Esta Ley cancelaba la participación de las comisiones de energía de los estados correspondientes en los procesos de valoración y aprobación de los asentamientos de las regasificadoras. Los gobernadores de varios estados, como California, Alabama, Mississippi, Rhode Island, Delaware, Massachusetts, New Jersey y Louisiana han enviado sendas cartas de protesta al gobierno federal.
Con este poder en la mano, se sospechó que la FERC emitiría de forma inmediata las actas de aprobación de algunas plantas. Conocedores de esta posibilidad, cientos de vecinos de la ciudad de Fall River se concentraron el día 30 de julio en una asamblea ciudadana, alrededor de las típicas barbacoas, en el parque de la ciudad para seguir las noticias sobre la posible decisión de la FERC de aprobar la planta de Fall River.
Efectivamente, allí se supo que este organismo aprobaba las plantas de Sabine Pass y la de Fall River, rechazando el proyecto de Providence.
No se hicieron esperar declaraciones en contra de esta decisión de la FERC que fueron publicadas en los medios de comunicación y entre las que se pueden encontrar en la “red” destaco las de las siguientes personalidades:
Alcalde de Fall River Edward Lambert, Presidente de la coordinadora ciudadana opuesta a la planta J Carvalho, Gobernador de Massachusetts Mitt Romney, Gobernador de Rhode Island Don Carcieri, Fiscal general de Rhode Island Patrick Lynch, Fiscal general de Massachusetts Tom Reilly, senadores John Kerry y Edward Kennedy (demócratas por Massachusetts), senador Jack Reed (demócratas por Rhode Island), senadores Barney Frank and James P. McGovern (demócratas), Lincoln Chafee (republicanos por Rhode Island), director ejecutivo del colectivo Save the Bay (salvemos a la bahía) Curt Spalding, jefe de bomberos de Providence George Farrell, director de Protección Civil Leo Messier, alcalde de Providence David N. Cicilline, ex – asesor contra-terrorismo de la Casa Blanca Richard A. Clarke (dimitió por no apoyar a Bush en la estrategia de la existencia de armas de destrucción masiva en Irak), etc
Me hubiera gustado listar los nombres de políticos, hombres de leyes, profesionales de protección civil o bomberos, etc., de nuestra ciudad, región o provincia que de alguna manera hubiesen manifestado su opinión responsable contraria a la ubicación de la planta regasificadora de Ferrol.. Aunque conozco algunos casos que sí lo hubieran hecho de muy buena gana, pero. . . ., Apenas un partido político nacional, Izquierda Unida (IE) y uno local, Independientes por Ferrol (IF), han mantenido una postura inequívoca de rechazo y otros que por no seguir las instrucciones partidistas han tenido que dimitir o fueron “dimitidos”. A todos mi agradecimiento por su postura honrada de servicio a la ciudad. Quiero citar en particular la figura de general D. José M. Gabeiras Montero por su firme posición de rechazo a la planta de GNL y por su incondicional apoyo a las asociaciones de vecinos de la zona, en los últimos años de su vida.
Se inicia de inmediato en Fall River una fuerte actividad jurídica en contra de esta decisión. El ayuntamiento instruye a un prestigioso bufete de abogados de Washington que “empapele” los pasos de aprobación de esta planta mediante procesos judiciales, poniendo a disposición de este bufete una asignación de 650.000 dólares para este fin. Las demás ciudades de la zona, indicadas en el mapa y afectadas por el movimiento de los gaseros, siguen esta iniciativa y en días sucesivos al 30 de julio pasado, se realizan plenos especiales en sus respectivos ayuntamientos aprobando aportaciones económicas que se van sumando a la ya conocida de Fall River. También el ayuntamiento de Ferrol inicia los procesos jurídicos de alegaciones y contenciosos y que todavía siguen su curso. Espero que la política de hechos consumados no horade el estado de derecho y se consiga poner la planta en su sitio, fuera de la ría. En España, esta política de hechos consumados parece muy común, pues incluso un alcalde de la región se jactaba de ello diciendo “no conozco ninguna obra que una vez iniciada fuera parada, ni las murallas de China”. ¡y es un alcalde de una ciudad importante!.
En estos momentos, mediados de septiembre, entra en escena la Naval Undersea Warfare Center de New Port sumándose a los esfuerzos que los políticos y personalidades de los estados de Rhode Island y Massachusetts están realizando en Washington para que se revise el proceso de aprobación, teniendo en cuenta el impacto que la navegación de los gaseros puede suponer para la bahía de Narragansett, para la operatividad de la Marina de Guerra y las consecuencias que para la ciudadanía de la bahía podría tener un ataque terrorista a uno de los gaseros o a la planta. También en Ferrol se han realizado informes desde instancias de la Armada Española y que han transcendido a los medios pero que, oficialmente, no fueron ni confirmados ni comentados por los organismos de Defensa.
Hoy día 16 de septiembre, la FERC informa que se abre un nuevo período de consultas sobre la planta de Fall River, en principio sin limitación de tiempo, para analizar y valorar los últimos informes que se habían entregado en ese organismo, principalmente los de la Armada (Navy) en fechas anteriores al día de la aprobación, tal como se lee en un comunicado firmado por los senadores John F. Kerry and Edward M. Kennedy junto con los representantes republicanos Barney Frank and James P. McGovern. Si la revista ATENEA me da la oportunidad de poder informar, en alguna edición posterior, sobre el resultado de estas valoraciones, lo haré encantado.
Este artículo quiere resaltar el grado de involucración en temas sociales que tienen los políticos y administradores de EE.UU. en comparación con los de nuestro país. Además allí en EE.UU. los rechazos de las plantas de GNL está diariamente referenciados en los medios de comunicación escritos y destacar que de las más de 40 plantas solicitadas ya se han cancelado unas 8 por presiones de las poblaciones cercanas. Casos como Rhode Island, Harpswel, Vallejo, Eureka, Tijuana, etc. han sido fuertemente discutidas en estos medios. Aquí en España NO. El lector deducirá las razones, aunque es posible que no sean tan LIBRES para expresar o dejar de expresar opiniones.
También pretendo con este artículo desenmascarar a los que en las poltronas del poder dicen con prepotencia y petulancia que los que se oponen a las plantas de GNL son los de siempre, los enemigos del progreso, etc, etc., etc. En EE.UU. parece que no es así.
Conclusiones:
1º) La planta de GNL de Providence fue rechazada por su proximidad a poblaciones agrupadas pues estaba a 1´5 km de distancia. La de Ferrol está a 100 metros de Mehá, 500 metros de Mugardos y a 1km de Ferrol. Aquí no se han tenido en cuenta las distancias, ya que la planta ha recibido la aprobación del gobierno.
2º) El canal de acceso a la ría de Providence tiene 1.500 metros de ancho. El de Ferrol tiene 200 metros, en donde el gasero puede llegar a cruzarse en el canal. Aquí se ha aprobado sabiendo que el gasero no puede entrar en cualquier condición y menos salir en caso de emergencia.
3º) Los profesionales de Protección Civil y bomberos de Fall River y Providence no solo han informado a la población sobre los riesgos de estas plantas, lo cual es su deber, si no que se han puesto claramente en contra de la ubicación de las mismas. En Ferrol ni se han visto.
4º) Los políticos (demócratas y republicanos) y administradores de las ciudades de Fall River y Providence han tenido una opinión unánime en contra de las ubicaciones propuestas. En Ferrol también, pero a favor, salvo las honrosas excepciones que antes comenté.
5º) La Armada de los EE.UU. se ha opuesto contundentemente en contra de estas ubicaciones en el interior de la ría de Narragansett. Al parecer en Ferrol también, según se ha recogido en los medios.
6º) Los medios de comunicación de las zonas afectadas están jugando un papel muy elogiable ya que han nominado a periodistas en exclusiva para atender el debate sobre las ubicaciones. De hecho todos los datos que he manejado en este artículo los he recibido a través del servicio de “lectores” de los periódicos de la zona de Narragansett y del servicio de “google alert” . ¡Que diferencia de periodismo! Aquí en Ferrol, algún medio hizo lo mismo, nominando a una periodista en exclusiva, pero para informar siempre a favor de la planta.